Magia #1

Desde el momento que te vi, supe que algo pasaría entre nosotros.

Tus manos, tus caricias, tus sonrisas. Todo era perfecto. Sentía que realmente podía vivir algo más que un romance.  Fuiste ese secreto que no quería guardar. Fuiste mis sonrisas de día y mis risas de noche.
A tu lado me sentía en las nubes. Era más sonrisa que cara. A veces sentía que no merecía eso. Pero al ver tus ojos o escuchar tu voz, olvidaba hasta del respirar.

Quizá no compartimos mucho tiempo. Pero cada segundo lo valore como si fuera el tesoro más grande.

Nunca te reproche nada, y no es que no tuviera motivos. Es que sabia tu pasado y tus vivencias. No quería hacerte sufrir más. Quería que fueras el ser viviente más feliz del universo.

Algo hice mal. Pero aun no entiendo que fue.

Cuando te fuiste, me prometí no llorar. No porque no lo valieras. Solo porque no quería que supieras que pude ponerme mal por algo tan insignificante como un adiós. Quizá fue tu cobardía lo que hizo que ya  no quisiera pelear. Quizá fue que no quería rogar. 

Nos hicimos una promesa. O quizá solo fue un trato. O un tal vez... Uno que sigo esperando